La Sigatoka Negra, la enfermedad del Banano
Es una destructiva enfermedad foliar, se encuentra presente en todos los países de producción bananera, su nombre proviene del Valle de Sigatoka en las Islas Fiji, la enfermedad es causada por el hongo Mycosphaerella fijiensis Morelet, y constituye el principal problema fitopatológico en estos cultivos.
El patógeno destruye rápidamente el tejido foliar, reduciéndose la fotosíntesis, como consecuencia se afecta el crecimiento y producción de la planta, en un cultivo se observan todas las etapas de la enfermedad, los síntomas iniciales son prácticamente imperceptibles, en una primera etapa se pueden visualizar diminutas decoloraciones o pecas en el envés de la hoja.
En las etapas 2 y 3, las pecas se tornan de un color marrón rojizo y alcanzan los 2 a 3 milímetros, para ese momento se pueden observar a ambos lados de las hojas, la evolución de la enfermedad se evidencia en el oscurecimiento y tamaño de las manchas, finalmente el centro de dichas manchas se seca y se observa de color entre grisáceo y negro, llamados síntomas de necrosis o quema del área foliar, lo que reduce la capacidad fotosintética de las hojas.
En ausencia de medidas de control en los cultivos, la enfermedad puede reducir hasta en un 50 % el peso del racimo y causar pérdidas del 100 % de la producción debido al deterioro en la calidad del fruto.
El impacto económico de esta enfermedad
El banano ocupa el cuarto lugar dentro de los cultivos de alimentos económicamente más importantes del mundo. Se cultiva en más de 120 países, principalmente en regiones tropicales y subtropicales. Como alimento básico, los bananos, incluidos los plátanos, contribuyen a la seguridad alimentaria de millones de personas.
Su producción y comercialización en mercados locales proporcionan ingresos a las poblaciones rurales, en los casos de exportación, contribuye de manera significativa con países de bajos ingresos, es la fruta fresca más exportada tanto en volumen como en valor.
En Colombia se producen principalmente: El banano criollo, utilizado para el consumo interno, se produce principalmente en los departamentos de La Guajira, Quindío, Antioquia y Valle del Cauca. Y el banano de exportación, con sistemas de producción de alto nivel tecnológico.
Una de las limitantes que impacta la producción bananera es la presencia de la Sigatoka Negra, por las pérdidas que representa, además del incremento en los costos de producción, a nivel mundial se estima que el costo para el control de esta enfermedad es de aproximadamente USD 2.500 millones por año.
Condiciones que favorecen el desarrollo de esta enfermedad
El desarrollo de la enfermedad se encuentra directamente influenciado por altas temperaturas, humedad relativa y lluvias, es por lo tanto que las condiciones climáticas son determinantes en su desarrollo.
Las zonas más afectadas por la Sigatoka Negra tienen las siguientes características: precipitaciones mayores a los 1.400 mm anuales, humedad relativa superior al 80% y temperaturas promedio entre los 23 y 28 ºC.
Por lo anteriormente nombrado, la enfermedad es más agresiva en épocas lluviosas, el mantener la humedad en las hojas, favorece los procesos de liberación de esporas. Otros factores como la falta de drenajes, retraso en deshoje, la variedad del cultivo y las corrientes de viento, hacen más difícil el manejo de esta enfermedad.
Manejo de la Sigatoka Negra
Para esta enfermedad, no existe un control total, por una parte, no podemos controlar las condiciones climáticas que inciden de manera favorable en su desarrollo, además estos son cultivos permanentes en los países del trópico, se cultivan y se cosechan durante todo el año.
Se pueden establecer estrategias de manejo que permitan mantener a raya los niveles de infección, mediante el uso adecuado de fungicidas y la aplicación de bioinsumos (agentes microbianos de uso agrícola y extractos vegetales).
Semillas Valle, ha desarrollado planes de manejo que incluyen el uso de Bactox SL, un protectante biológico, formulado con esporas viables de Bacillus subtilis y con Tecnología DuoBiox, diseñado para el control de bacterias y hongos fitopatógenos causantes de las enfermedades de las plantas.
Inhibe la secreción de enzimas que requiere el hongo para penetrar y comenzar a dañar las hojas, bloqueando al hongo, impidiendo la degradación de los tejidos.
Cuenta con certificación orgánica que permite su uso en Agricultura Orgánica cuyos productos o subproductos van a ser exportados a Europa, Norteamérica y Asia. Es el bioinsumos para el control de enfermedades de plantas con la menor categoría toxicológica.
Bactox SL, puede ser aplicado como protectante combinado con fungicidas sistémicos para controlar Sigatoka Negra, es una herramienta viable en el control de dicha enfermedad debido a que es eficiente y encaja con las exigencias del mercado de banano, de cara al consumidor final, contribuyendo a la disminución de la carga química.